SI PIENSAS....

Si piensas que estás vencido, lo estás;
si piensas que no te atreverás, no lo harás;
si piensas que te gustaría ganar, pero no puedes,
es casi seguro que no lo lograrás.


Si piensas que vas a perder, ya has perdido;
porque en el mundo encontrarás
que el éxito comienza con la voluntad;
todo está en el estado mental.


Muchas carreras se han perdido
antes de haberse corrido,
y muchos cobardes han fracasado
antes de haber su trabajo empezado.

Piensa en grande y tus hechos crecerán,
piensa en pequeño y quedarás atrás,
piensa que puedes y podrás;
todo está en el estado mental.


Si piensas que estás aventajado, lo estás;
tienes que pensar bien para elevarte,
tienes que estar seguro de ti mismo,
antes de ganar un premio.


La batalla de la vida no siempre la gana
el hombre más fuerte o el más ligero,
porque tarde o temprano, el hombre que gana,
es aquél que cree poder hacerlo.




Napoleón Hill ha sido quizás el hombre más influyente en el área de logro personal de todo el tiempo. Su clásico "Piense y hágase rico" ha ayudado a millones de personas y ha sido importante en la vida de muchas personas de éxito incluso en la de W. Clement Stone y Og Mandino.Su cita más famosa era: "lo que la mente de hombre puede concebir y puede creer, puede lograr." Luchando contra toda clase de grandes desventajas y presiones, dedicó más de 25 años de su vida a entrevistar a los grandes triunfadores e investigar sus carreras. ¿Su meta? Aislar y definir las razones por las cuales tantos fracasan y tan pocos alcanzan el éxito.



QUE HACER CUANDO SE MUERE EL CABALLO

Publicadas por Ana Karina Gallardo Gómez


John C. Maxwell

“El Lado Positivo del Fracaso”
Quizás el enemigo más implacable de los logros, del crecimiento personal y del éxito es la inflexibilidad. Algunas personas parecen seguir tan enamoradas con el pasado que no pueden entenderse con el presente.No hace mucho, un amigo me mandó «Las diez mejores estrategias para vérselas con un caballo muerto». Me pareció que la lista era para reírse:
1. Compre un látigo más fuerte.
2. Cambie al jinete.
3. Nombre un comité para que estudie el caballo.
4. Nombre un equipo para que reviva el caballo.
5. Envíe un memo diciendo que en realidad el caballo no está muerto.
6. Contrate a un consultor caro para que encuentre «el verdadero problema».
7. Ponga a varios caballos muertos juntos para aumentar la velocidad y la eficiencia.
8. Escriba varias veces la definición estándar de caballo vivo.
9. Declare al caballo como el mejor, más rápido y más conómico cuando está muerto.
10. Promueva al caballo muerto a una posición más elevada.
Le apuesto a que ha visto cada una de estas «soluciones» aplicadas en su lugar de trabajo. Pero realmente hay sola una manera efectiva de tratar con el problema. Cuando se le muera su caballo, por el amor de Dios, desmóntese.
Una tira cómica de Calvin y Hobbes ilustra la manera en que muchos de nosotros percibimos el cambio. Calvin y su amigo el tigre presumido venían bajando un cerro a toda velocidad en el cochecito del niño. Calvin le gritó a Hobbes, que venía tras él:
—Me encanta el cambio.
Sorprendido, Hobbes, le dijo:
—¿Tú, que esta mañana te pusiste furioso cuando mamá puso menos mermelada en tu tostada que ayer?
Calvin enfrentó a Hobbes y le explicó:
—No me has entendido. Me encanta el cambio en otras personas.
El denominador común del éxito radica en formarse el hábito de hacer cosas que a los que fracasan no les gusta hacer.—Albert Gray
Usted no tiene que estar loco por cambiar para tener éxito, pero sí tiene que estar dispuesto a aceptar el cambio.
El cambio es un catalítico para el crecimiento personal. Lo saca de la rutina, le da un nuevo comienzo y le provee de una oportunidad para reevaluar el rumbo que lleva.
Si se resiste al cambio, en realidad se está resistiendo al éxito. Aprenda a ser flexible o aprenda como vivir con sus fracasos.